La Pilea Peperomioides es una de la plantas más fáciles de cuidar y que más están de moda en interiorismo y decoración de viviendas, no en balde se ha convertido en la reina de la plantas de tamaño pequeño-mediano.

¿Cuál es la Planta China del Dinero?
Pues sí, la planta de moda para decorar tu vivienda es esta preciosidad conocida como Pilea Peperomioides o Planta China del dinero. Es muy estética debido a sus hojas redondeadas y a su verde intenso, lo que la hace perfecta para decorar tu vivienda y hacerla más acogedora.
Es una planta de gran belleza, que crece muy rápido. Conseguirás el tamaño adecuado para tu hogar simplemente utilizando un tamaño de maceta u otro, según te convenga, ya que si no tienen espacio dejan de crecer.


¿Dónde poner la Pilea Peperomioides?
Coloca tu planta Pilea Peperomioides en una habitación luminosa sin que incidan los rayos del sol directamente sobre ella, como por ejemplo el salón-comedor o un dormitorio exterior. Si quieres ponerla en una estancia que da a un patio de luces, colócala en el lugar de la estancia que más luz natural recibe y ve con más cuidado en el riego, ya que necesitará mucho menos. Por lo general, no tolera bien las corrientes de aire, así que ten cuidado al ventilar la casa.


¿Cómo colocar la planta Pilea para decorar?
En la mayoría de las viviendas, la Pilea Peperomioides no se hacen muy grandes. Así que lo ideal es colocarlas por ejemplo en una estantería o balda que reciba luz natural y a la vez esté protegida de las corrientes de aire. O creando un conjunto de plantas sobre un mueble o una mesa.
Si tienes la suerte de que las características de tu vivienda permiten que la planta crezca frondosa y grande, elévala del suelo y colócala sobre un mueble como un aparador o una cómoda, o sobre un soporte para plantas para que quede a una altura donde la puedas apreciar mejor y la planta luzca más bonita.




¿Cómo se cuida y cómo regar una planta Pilea Peperomioides?
Las Pileas en general son muy poco exigentes con los cuidados y llevan muy mal el exceso de agua. Por eso, lo recomendable para regarlas es llenar una pequeña palangana o un plato hondo con agua, y regarla por inmersión. Cuando veas que ya no queda agua y que la tierra esta mojada hasta la superficie, retiras la planta del agua y la dejas escurrir para asegurarte que no se queda agua almacenada. Riégala cuando toques la tierra y esté completamente seca.





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