El Poto: una planta de interior resistente y fácil de cuidar

El Poto es una de esas plantas de interior que puede triunfar en cualquier casa, porque reúne 3 cualidades que la hacen perfecta: es resistente, fácil de cuidar y luce preciosa en cualquier lugar.

Índice

¿Qué es un Poto?

Se trata de una planta con largos tallos, raíces aéreas y hojas ovaladas acabadas en punta que según la cantidad de luz que reciben, pueden tener diferentes patrones en verde intenso, verde claro, o incluso blanco, haciendo de cada hoja un verdadero espectáculo.

¿Dónde poner la planta Poto en casa?

Se trata de una planta muy versátil que puedes colocar tanto en estancias luminosas como por ejemplo el salón-comedor, como en habitaciones con poca luz como por ejemplo un dormitorio que de a un patio de luces. Eso sí, cuanta más luz natural tengan, más cantidad de hojas tendrás con patrones distintos.

¿Cómo colocar el Poto para decorar?

Al tener los tallos largos y flexibles, puedes colocarlo de varias formas.

La primera forma es colgado. Elige un lugar alto como una estantería o un mueble alto y deja caer sus tallos hacia abajo.

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También puedes colocar tu Poto sobre un soporte para plantas alto y dejar de nuevo caer sus tallos.

La segunda forma es colocar tu Poto de forma trepadora ayudado por un tutor sobre el que se desarrollan las raíces aéreas y la planta crece hacia arriba.

¿Qué cuidados necesita el Poto y cuándo hay que regarlo?

Riega tu Poto cuando notes que la tierra está seca. Si las hojas se vuelven amarillas, significa que tiene demasiada agua, así que reduce la cantidad que le echas en cada riego.

Además de ser muy resistente, lo mejor de esta planta es que cuando tienes los tallos muy largos, puedes cortarlos y plantarlos en la tierra directamente. Así controlas la forma que coge tu planta y además conseguirás una base frondosa.